martes, 1 de mayo de 2012

Tréboles de cuatro hojas

Antiguamente, se pensaba que encontrar un trébol de cuatro hojas traía la felicidad a aquella persona que diese con él. Se decía que en la planta, cada uno de los cuatro foliolos que en realidad componen su única hoja, representaban los cuatro aspectos de la felicidad: la esperanza, la fe, el amor y la buena suerte.
Por eso, durante mucho tiempo, en algunas ceremonias celtas de las Tierras del Norte, se lanzaban tréboles a los recién casados tras su enlace para que estos fuesen felices durante el resto de su vida. Y por ello, también se dice que cuando una persona encuentra un trébol de cuatro hojas y se lo entrega a otra, está demostrando su amor hacia ella y su intención de ligar su vida con la de esa otra persona para el resto de sus días.
Ese es el motivo por el que llevo días buscándote uno.